jueves, 10 de abril de 2014

Tinta china con plumilla

    A estas alturas seguimos experimentando con distintas técnicas, siempre teniendo en cuenta que el dibujo es una disciplina, y como tal requiere de un trabajo continuo, de una práctica, de una destreza que se adquiere dibujando. Vuelvo a repetir una de mis frases: "A dibujar se aprende dibujando", sobre todo cuando nos acercamos a un procedimiento técnico no habitual, como es la tinta.
   Vamos a comenzar con la tinta aplicada con plumilla, realizando los volúmenes mediante tramas de distinta factura. 
     Una vez que hemos practicado realizando un degradado hecho con trazos verticales de separación creciente, luego otro cruzando el trazo, y por último mediante pequeños trazos, vamos a realizar dibujos copiando a uno de los grandes, a Giorgio Morandi. 
   Tenéis que escoger uno de estos seis dibujos para copiarlo, lo seleccionáis y lo sacáis por impresora. No olvidéis que primero hay que realizar el dibujo de encaje con lápiz de grafito. El más indicado es un lápiz duro, por ejemplo el 2H, y si siempre os digo que no apretéis, ahora con más razón. Os recuerdo que el papel para dibujar tinta ha de ser absorbente, y por tanto tendrá mayor grosor, por lo que un lápiz duro, que tiene la ventaja de manchar poco, tiene el inconveniente que puede arañar la superficie del papel. El grafito se borra, la presión que ejercéis sobre el papel no.

   Así que manos a la obra, poneos cómodos, musiquita relajante, paciencia, mucha paciencia, y a dibujar